Tengo tanto por contarte, mi cabeza no ha parado de pensarte.
Las palabras se me escapan de los dedos y la esperanza gesta desesperación.
Sigo siendo la misma niña caprichosa que un día dijo no.
Quiero hacer mi voluntad, por eso pido perdón.
Mis sentimientos reconocen tu voz y mi mente fantasea con tenerte.
Si te soy honesta, no comprendo este despertar.
Si te soy honesta, me da rabia; después de tantos años, hoy sí quiero estar.
¿Quién se ríe de este chiste?
Quiero contar la historia más bonita, quiero contar la historia más irónica.
Quiero terminar con estos mariposaurios, pues crecieron sin mi autorización.
Quédate a mi lado, porfa (esa palabra pertenece a vos).
Fuiste, eres...
¿Serás?
Ref.
Mariposaurios:
Mariposas en el estómago como señal de enamoramiento, pero de mayor tamaño.
Back to Top